Giovane Elber, Bixente Lizarazu y Hasan Salihamidzic. Tres hombres que levantaron la Champions-League en 2001. En las vitrinas del museo no solo estaba esa copa, sino el resto de títulos de los 117 años de historia del club. Karl-Heinz Rummenigge y Uli Hoeneß no tuvieron que remontarse al pasado para recordar el último hito de su club.
Hace 12 horas el Bayern se impuso 5-1 al Arsenal en la ida de octavos de final de la Champions League y hoy ambos directivos analizaron el choque en el Erlebniswelt standen. "Fue una noche para disfrutar. Estoy totalmente feliz. Creo que este equipo juega muy bien al fútbol cuando llega lo serio", reconoció Hoeneß.
"La mentalidad del Bayern"
Rummenigge habló de un "mensaje impresionante del potencial del equipo" y añadió: "Fue un partido magnífico que fue retransmitido en todo el mundo. Se vio que el equipo se puede concentrar al punto necesiario". El máximo responsable de la actuación de los suyos fue, para Hoeneß, el técnico Carlo Ancelotti: "Carlo es un fantástico entrenador, que ya ha demostrado que puede conformar grandes equipos de jugadores individuales".
"Jugamos como siempre nos planteamos", aseguró el capitán Philipp Lahm al abandonar el Allianz Arena tras la noche europea. Arjen Robben comentó: "Llevo siete años y medio aquí. Y cuando llega lo importante, siempre estamos ahí. Esa es la mentalidad del Bayern".
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