La primera victoria ya la logró Jupp Heynckes esta semana. El técnico se sobrepuso al resfriado que lo atormentaba desde el fin de semana pasado. El jueves por la mañana, el entrenador del FCB regresó al campo de entrenamiento y tenía dos motivos para celebrar. Porque a parte del convaleciente Manuel Neuer, todos sus jugadores pudieron participar de la sesión.
20 jugadores de campo y tres porteros corrieron, resbalaron y dispararon tras las cortinas echadas. La preparación para el partido de Bundesliga en Wolfsburg del sábado (15:30 CET) está en pleno apogeo. El hecho de que Heynckes nuevamente no pueda incorporar a algunos jugadores a su convocatoria de 18 hombres, apenas supone un dolor de cabeza al viejo profesor. "Es un lujo para un entrenador tener muchas alternativas", dijo hace unas semanas. Y ahora que la primera semana de Liga de Campeones ha terminado después de las vacaciones de invierno, hay muchas oportunidades para la rotación.
Hummels apenas puede esperar
La ilusión por los próximos retos, especialmente en la Liga de Campeones, es enorme en los jugadores. "Uno ve estos partidos y sabes que la próxima semana estaremos en ello, es simplemente una sensación genial", dijo Mats Hummels después de las primeros partidos de la competición reina, que ya se disputaron en los últimos días.
El próximo martes, el Besiktas Estambul llegará al Allianz Arena. Tres semanas más tarde (14 de marzo), se disputará el partido de vuelta en Estambul. "Estoy deseando que lleguen estos partidos y escuchar el himno de la Champions League", dijo Hummels, "han pasado más de dos meses". Después de la enfermedad de Heynckes, ahora la fiebre de la Champions ataca al Bayern.
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