Este martes se cumplen 60 años del trágico accidente de avión sufrido por el avión del Manchester United en Múnich. El 6 de febrero de 1958 el conjunto inglés regresaba de un encuentro disputado ante el Estrella Roja de Belgrado y sufrió un accidente en el aeropuerto de Riem. 23 de los 44 tripulantes fallecieron, entre ellos 8 jugadores del club inglés. El equipo del Manchester de aquella época era conocido como los "Busby Babes", en honor a uno de los técnicos más talentosos de la historia: Matt Busby.
Con motivo de los 60 años de aquella tragedia, se celebró un acto de homenaje esta mañana en Múnich, en el que participaron los directivos del Bayern Karl-Heinz Rummenigge y Uli Hoeneß, así como el alcalde de la ciudad Dieter Reiter. El acto también contó con la presencia de Alan Dawson y Denis Irwin en representación del Manchester United.
"El Manchester United ha sudo un punto de orientación en mi vida futbolística", comentó Rummenigge en su discurso. Más de 1.200 personas, muchos de ellos aficionados de los Red Devils, se concentraron en la Manchesterplatz de Trudering. En dicha plaza se erigió en 2004 un monumento en recuerdo de todas las personas fallecidas en el accidente aéreo.
"El Manchester United fue y es mucho más que victorias, derrotas, títulos o finales. El Manchester United es un lugar de entrega, alegría pero también tristeza profunda. Me sigue impresionando como se transmite este recuerdo a las nuevas generaciones del United. Queridos aficionados del Manchester United, espero que en un día como hoy, permitan unirme a su dolor: We will never forget you. No los olvidaremos nunca", añadió Rummenigge en su discurso.
Hoeneß describió el acto como una "historia increíble, muy emotiva" y destacó la gran presencia de aficionados. "El fútbol se basa en la rivalidad, la amistad y el respeto. Hoy mandamos un mensaje de respeto a un gran club y a sus increíbles aficionados", concluyó Hoeneß.
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