No se le podía parar. En la derrota por 1-2 en la ida de las semifinales de la Champions League contra el Real Madrid, Franck Ribery dominó la banda izquierda, tal y como lleva haciendo más de diez años en el Bayern. "Tiene 35 años y ha hecho un partido excelente", lo alabó Jupp Heynckes.
Le edad no se le notó al francés. Durante los 90 minutos, corrió de arriba hacia abajo, poniéndo en serios apuros a la defensa del Real Madrid. "Es un jugador excepcional, tiene mucha calidad y lo ha vuelto a mostrar", continuó su entrenador.
Los españoles estaban impresionados
Heynckes no fue el único que estaba impresionado por la actuación del extremo. "Ribery fue la gran pesadilla alemana", publicó el periódico español Marca. "Ribery está diez años más jóven. Se mostró descarado, duro y rápido", escribió AS de Madrid. Ribery estuvo involucrado en casi todas las acciones ofensivas de los muniqueses.
Fue el que más veces tiró a puerta (cuatro, como Lewandowski) y puso la mayoría de centros (siete). Además, fue el que disputó más duelos de todo el equipo (19). Solo no logró una cosa: un gol. Con un Ribery en este estado de forma, el Bayern puede confiar positivamente en la remontada. Por eso mismo, el jugador se mostró listo para la batalla:
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