Un pequeño pueblo de Alemania que vive estos días un gran alboroto. El sábado viajará el Bayern de Múnich a visitar al segundo clasificado de la liga regional norte en Dorchtersen - a unos 50 kilómetros al noroeste de Hamburgo - para disputa el primer partido de la Copa DFB. Mientras que para los muniqueses es obligatorio salir de allí con un triunfo, para los jugadores del SV Dorchtersen/Assel se trata del partido de sus vidas. "Es el partido del siglo. Nunca se ha dado algo así" se alegraba el alcalde de Dorchtersen Mike Eckhoff ante los micrófonos de la prensa alemana.
De hecho el SV D/A juega en la cuarta división y normalmente tiene por rivales a clubes como el TSV Havelse, el VfB Lübeck o el USI Lupo-Martini Wolfsburg. Pero ahora les visitará el más laureado club alemán y el pueblo de 11.000 habitantes está encantado. "La gente arde de entusiasmo" explicaba Eckhoff, "algo así pasa quizás una vez cada 100 años".
Un recuerdo para la eternidad
"Todos están como embriagados" comentaba el defensor del Dorchtersen Meickel Klee. "Llevan semanas deseando que llegue el partido. En parte están más emocionados que nosotros mismos". Por ese motivo, los artículos de la tienda del club son actualmente los más demandados y la capacidad del estadio Kehdinger se ha incrementado de 3.000 a 7.000 con gradas adicionales. La idea de disputar el partido en el Millentor-Stadion del FC St. Pauli fue desechada rápidamente a pesar de las ventajas financieras. "Queremos quedarnos en Dorchtersen. Queremos que el partido quede en el recuerdo de la gente y de la región" dijo con orgullo el presidente del club Rigo Gooßen.
Sobre todo, para los jugadores será algo inolvidable independientemente del resultado. En muchos aspectos es un duelo entre David y Goliat. Ninguno de los jugadores locales tiene el fútbol como profesión principal. Por ejemplo, el zaguero Klee trabaja como albañil y podría verse las caras en su banda derecha con Franck Ribéry. Para él es un sueño hecho realidad. "Soy hincha del Bayern desde hace 23 años. Es como ganar la lotería" decía Klee entusiasmado y soñando un poco con la posibilidad de sorprender. "De lo contrario, ni siquiera tendríamos que competir".
La ilusión en el norte de Alemania es enorme, sobre todo porque Klee y cia. ya dieron la sorpresa hace dos años. En la primera ronda de la Copa DFB, el Dorchtersen/Assel perdió ante el Borussia Mönchengladbach por un ajustado 0-1. Así que el Bayern ya está avisado.
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