A pesar de que el 1 de noviembre es festividad pública en Múnich, en la ciudad deportiva del Bayern la actividad era alta. En dos días llega el duelo de la Bundesliga con el SC Freiburg y la preparación deportiva está en pleno apogeo. Después de que el campeón alemán en el día anterior tuviera que lidiar con la mala noticia del diagnóstico de Thiago, hubo una razón de alegría para Niko Kovac este jueves.
Aparte del internacional español, solo los dos lesionados de larga duración Kingsley Coman y Corentin Tolisso faltaron en la sesión de la mañana. Los jugadores que no pudieron competir en Copa, al igual que hicieron el miércoles, mostaron sobre el césped su gran deseo de jugar el próximo fin de semana. El Bayern quiere ampliar ahora su racha de cuatro triunfos con otra victoria en el Allianz Arena.
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