En teoría, los balones naranjas ya estaban guardados en el trastero, pero, la repentina nevada en Múnich durante la mañana del lunes hizo que se tuvieran que volver a sacar. Gracias a las labores jardinero, el campo de entrenamiento quedó rapidamente despejado y Niko Kovac y su equipo pudieron comenzar a prepararse para la vuelta contra el Liverpool.
Junto a los lesionados Arjen Robben (gemelo) y Corentin Tolisso (ligamento cruzado anterior), Niko Kovac tampoco pudo contar con Thomas Müller por motivos familiares ni con Robert Lewandowski, que trabajó de forma individual en el gimnasio. David Alaba y Kingsley Coman participaron en la sesión con el resto del equipo, como ya hicieran el día anterior.
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