Las gotas de sudor caen por la frente y los jugadores respiran profundamente. Con solo observar el entrenamiento, se hace evidente: El Bayern se encuentra en plena pretemporada. Los muniqueses trabajaron a una temperatura de 22 grados para seguir sentando las bases de una exitosa temporada.
El inicio de la sesión se basó en un calentamiento intenso con ejercicios de fuerza y esprint. En los ejercicios de pases tampoco se permitió la más mínima relajación. Los jugadores fueron de una esquina a otra a toda velocidad sin poder errar ningún pase al compañero. Todo se basó en unificar la precisión y la fuerza, algo que hicieron de maravilla los jugadores bávaros.
Hernández corre - Los internacionales llegan el viernes
Niko Kovac estaba muy satisfecho con el trabajo de sus jugadores. "Mucha calidad, chicos", dijo elogiando a los jugadores del primer equipo, como Thomas Müller, y a los canteranos que participaron en el entreno. La mayor alegría la protagonizó el nuevo fichaje, Lucas Hernández, en el campo anexo, donde realizó una sesión de carrera continua.
En el campo principal, los compañeros del campeón del mundo trabajaron en el sistema de juego. No se reservaron en ningún duelo y la pelota corrió de un lado a otro. Los jugadores quieren convencer a Kovac para poder optar a un puesto en el once titular. En la sesión a puertas abiertas del viernes, la competencia será mayor, puesto que los internacionales regresan a los entrenamientos. Manuel Neuer y cía habrán terminado sus vacaciones y ya solo harán una cosa: trabajar y sudar en la pretemporada.
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