Un entrenandor elegante, la patada de Klinsmann a la publicidad, "was erlauben Strunz" (frase que utilizó en su famosa rueda de prensa"... Giovanni Trapattoni dejó numerosos recuerdos imborrables en su etapa al frente del Bayern. El entrenador italiano dirigió al máximo campeón alemán durante tres temporada (1994/95 y desde 1996 a 1998). Bajo su mando, el Bayern ganó una liga (1997), una Copa DFB (1998) y una Copa de la Liga (1997). Hoy martes, Trapattoni cumple 81 años y fcbayern.com le desea un feliz cumpleaños.
El entrenador italiano recuerda con mucho carió sus tres años en la Säbener Straße. "Nunca voy a olvidar el gran respeto que me mostraron el Múnich. Tanto por parte del equipo como por los aficionados. No había experimentado eso en Italia", confesó Trapattoni en una entrevista con la revista del Bayern "Säbener 51".
"Me enamoré inmediatamente de esta ciudad. Múnuch es maravillosa. Allí me sentí más que en casa. Múnich siempre va a tener un lugar en mi corazón", afirmó el ex jugador profesional del AC Milan, que también coleccionó varios títulos en activo, entre las que destacan tres Copas de Europa y una Copa Intercontinental.
Además de sus conocimientos tácticos, su temperamento era otra de sus señas de identidad. En marzo de 1998, Trapattoni realizó una famosa rueda de prensa en la Säbener Straße. "En un principio me contuve, pero, de repente, el temperamento se apoderó de mí", cuenta un Trapattoni que, "más o menos, había planeado" lo que quería a decir, aunque "no que iba a decirlo de esa forma". "Un entrenador no es un idiota", "débil como una botella vacía" o el famosísimo "Ich habe fertig ("he terminado"). Muchas de esas expresiones permanecen en los recuerdos de muchos aficionados.
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