Tras 20 largos años de espera el Bayern volvía a llevar a Múnich un título internacional. En la final de la Copa de la UEFA en 1996 el FCB doblegó al Girondins de Burdeos en una final a ida y vuelta. Primero venció por 2-0 en el Olympiastadion de Múnich. El 15 de mayo, en la vuelta en tierras galas, se selló la gesta. El rival no era un cualquiera, ya que contaba en sus filas con Zinédine Zidane o Bixente Lizarazu.
Larga espera
El conjunto francés se veía bajo presión tras el resultado de la ida y tuvo que lanzarse. Sin embargo, el FCB no tenía entre sus planes que se le escapara el título. Oliver Kahn, en su segunda temporada en el club, se mostró seguro en las pocas ocasiones que tuvo el Burdeos. En la segunda parte Emil Kostadinov y Mehmet Scholl hicieron las delicias de los aficionados del Bayern que acudieron al Stade du Parc Lescure. En el 53 Kostadinov dio un taconazo al área, desde donde Scholl anotó el primero de la tarde.
Récord de goles y título
El segundo gol no tardó en llegar. Esta vez fue el propio Kostadinov quien marcó, de cabeza tras un saque de esquina botado por Scholl. Daniel Dutuel bajó la euforia muniquesa en el 76 con el 1-2, pero dos minutos después Jürgen Klinsmann -máximo goleador de la competición ese curso con 15 dianas- anotó el 1-3 definitivo y estableció un nuevo récord goleador en la Copa de la UEFA. Los últimos 13 minutos se hicieron eternos para la afición bávara que, en cuanto sonó el pitido finak de Vadim Zhuk a los 21 segundos de iniciarse el tiempo añadido, estalló de alegría. Por fin, 20 años después de Glasgow y con Franz Beckenbauer de entrenador, el Bayern volvía al trono europeo.