Un carácter decidido, un gran tackling, una breve mirada y un paso de ensueño a Kingsley Coman. En el minuto 28, Joshua Kimmich demostró ante el Atlético de Madrid una vez más lo que le hace tan importante para el FC Bayern. Con un compromiso, el motor del centro del campo bávaro sentó las bases de la victoria por 4-0 en el inicio de la Liga de Campeones. Coman redondeó el excelente trabajo previo de su compañero con el 1-0 y no dudó en elogiarlo tras el pitido final: "El pase de Joshua fue perfecto".
Un estilo de juego imposible de emular
Espíritu de lucha, mentalidad, a la par de mucha visión de juego y una gran precisión. Kimmich encerna un estilo de juego inimitable y se ha ido convirtiendo en los últimos meses más y más en un líder del máximo campeón alemán. "Jo es enormemente importante en nuestro centro del campo jugando de seis. Siempre ofrece una línea de pase, siempre sabe lo que hay que hacer", fueron los halagos que le dedicó Hansi Flick a su pupilo.
Motivación especial a raíz del nacimiento de su segundo hijo
Además de la asistencia de gol, sus 100 toques de balón y el 87% de precisión en pases hablan muy bien del partido del interncional alemán frente al Atlético. Su gran motivación llegó la noche antes del partido. El centrocampista se convirtió en padre por segunda vez. "Me puse feliz de que el niño llegara anoche y que pudiera jugar", comentó Flick. El fin de semana pasado, Kimmich no jugó contra el Arminia al encontrarse a la espera del nacimiento. A pesar de eso, el FCB pudo ganar cómodamente el partido, aunque Kimmich volvió a poner de manifiesto su importancia para el Bayern con su robo de balón que significó, a la postre, el 1-0 contra el Atlético.
Kingsley Coman fue el jugador más destacado del encuentro por su doblete y asistencia:
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