Campeón del mundo de selecciones, de Alemania, de la Copa DFB, de la Liga de Campeones, de la Supercopa de Alemania, de la Supercopa de Europa y del Mundial de Clubes. Quien crea que esta es una simple lista de títulos, está equivocado: Es la colección de títulos de Benjamin Pavard, Lucas Hernández y Corentin Tolisso. Los tres franceses son los vigentes campeones de siete títulos. ¡Increíble! En este recientemente conseguido Mundial de Clubes, uno de ellos, Pavard, fue incluso el responsable del gol decisivo de la final.
En el sitio y momento oportunos
Que Pavard sabe anotar goles bonitos e importantes es de sobra conocido desde el Mundial de 2018, concretamente desde los octavos de final contra Argentina, a quién le anotó el que, a la postre, sería el mejor gol del torneo. El de hoy no fue tan glamuroso, pero, como mínimo, fue igual de importante. Después de que el portero de Tigres, Nahuel Guzmán, despejara un cabezazo de Lewandowski, Pavard hizo gala de su olfato de gol y mandó el balón a la red cual ratón de área.
Una roca en defensa
Pavard creó peligro constantemente a lo largo de toda la final con sus precisos centros al área.
Curiosamente, el francés de 24 años tuvo que esperar unos minutos para poder celebrar. Su último gol fue hace 31 partidos oficiales (un gol de cabeza en el 5-0 al Fortuna Düsseldorf el 30 de mayo de 2020). No obstante, eso no es de relevancia, ya que esta no es una de las funciones de un lateral derecho. Que Pavard también brilla en defensa, es algo que también se hizo latente en el Mundial de Clubes. En la final contra Tigres fue el jugador que más balones interceptó (3). Ofensiva o defensivamente, el Bayern puede confiar a ciegas en Pavard, quien también es un seguro de vida en lo que a títulos se refiere.
El año del Bayern, resumido en seis momentos:
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