Reunir fuerza y precisión es un gran arte dentro del mundo del fútbol. En la goleada por 7-0 del Bayern al Bochum, Leroy Sané demostró de una forma impresionante cómo lo domina. En el minuto 27, el internacional se dispuso a tirar el libre directo y mandó el balón al fondo de la red desde unos 20 metros junto al palo. "Miré dónde estaba la barrera. Al final, simplemente decidí disparar directamente", fue la sencilla explicación del alemán de 25 años.
Fue el merecido 1-0 para el FCB y el resultado de un duro trabajo. "Entreno relativamente mucho las faltas. De hecho, antes del partido intento tener buenas sensaciones, también desde distintas distancias", explicó el goleador. En las últimas semanas, Sané se ha dedicado a entrenar el balón parado al final de cada entrenamiento. Disparaba continuamente el balón sobre la barrera hacia la portería. Ahora, ha visto la recompensa y un estreno: Es su primer gol a balón parado en la Bundesliga.
Golazo y asistencia
El internacional alemán se encuentra en un brillante estado de forma. "Veo que su desarrollo es muy bueno, ha estado increíblemente comprometido. Va con todo", lo elogió Julian Nagelsmann. Sané ha estado involucrado en un gol como mínimo por quinto partido oficial consecutivo (3 goles y 4 asistencias). Hoy incluso en dos. Su golazo fue la mecha inicial para el FCB. "Tras el 1-0 nos activamos y, a partir de ahí, empezamos a marcar goles", explicó Sané.
Solo diez minutos después de su gol, asistió a Joshua Kimmich en el área para que solo tuviese que empujar el balón para el 2-0. En el 6-0 de Lewandowski, Sané volvió a participar en la jugada: Le puso un gran balón a Serge Gnabry quien, a la postre, asistiría a Lewandowski.
La afición le aplaude
Poco después, Nagelsmann le dio descanso y lo sustituyó. Los aficionados estaban impresionados con la actuación de Sané y lo despidieron con un atronador aplauso. ¡Y con todo merecimiento, puesto que realizó una actuación muy convincente!
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