Michael Diederich entrega a Keiju Otsuka, presidente del club de fans del FC Bayern "Mia san Japan", la nueva segunda equipación con el número 25 de Thomas Müller. Alrededor de 100 representantes de los clubes de fans de toda Asia son los invitados al "Schmatz Ginza", todos aplauden y Keiju grita con fuerza "¡Mia san mia!". La unión del FC Bayern en acción, en pleno centro de Tokio.
Gran acogida de los aficionados asiáticos: "Desde Múnich y Baviera queremos hacerles llegar lo que es el FC Bayern"
Está claro que el FC Bayern siempre sabe dónde están sus raíces, explicó Diederich a los aficionados que habían viajado desde Japón, China o Corea. "Desde Múnich y Baviera queremos hacerles llegar lo que es el FC Bayern", continuó el Vicepresidente, quien, junto con el Vicepresidente Prof. Dr. Dieter Mayer y las dos leyendas Giovane Elber y Claudio Pizarro, recibió también un regalo especial para fomentar el intercambio entre las diferentes culturas: La delegación del FCB fue obsequiada con cabezas de Daruma: amuletos de la suerte en los que se escribe un gran deseo en un ojo - y en el otro cuando se ha hecho realidad.
Aplausos para los aficionados: (de derecha a izquierda) Prof. Dr. Dieter Mayer, Claudio Pizarro, Dr. Michael Diederich y Giovane Élber
Diederich, impresionado por el apoyo de la afición
Michael Diederich saludó a los aficionados en perfecto japonés, y se ganó un gran aplauso. A continuación, Dieter Mayer explicó el "Mia san Mia" que el club quiere transmitir: "Confianza en uno mismo, lucha por lo máximo... y que somos una familia, estemos donde estemos". También aquí hubo muchos aplausos. Giovane Elber dijo que deseaba "que el FC Bayern volviera pronto a Japón: el entusiasmo aquí es enorme".
Foto de grupo con Berni: El ambiente en el evento de fans en Tokio fue magnífico.
Diederich dijo que era impresionante la popularidad de los aficionados en Asia. En la segunda parada de este Audi Summer Tour volverán a organizar un encuentro de este tipo en el Paulaner Bräuhaus de Singapur, para el que se han inscrito más de 300 personas. "Queremos ir allí donde late el pulso de los aficionados", explicó Diederich, "para nosotros es importante que, como club, se nos pueda experimentar y estemos cerca, más allá del terreno de juego, y eso resuena en la gente. Notan que estamos auténticamente comprometidos con ellos e interesados". Así lo confirmó también este acto, en el que Giovane Elber y Claudio Pizarro fueron solicitados para autógrafos y selfies durante largo rato. Al final, todo el mundo cantó "¡Super Bayern, Super Bayern!" con las dos leyendas. El eco resonó fuerte y largo por todo el edificio.
Una delegación del FCB estuvo el viernes en la embajada alemana en Tokio:
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