La Copa del futuro

Tottenham, ManUnited, Benfica, Juve... En la U15 Elite Cup del campus del FCB, ocho de los mejores equipos europeos jugaron durante tres días por el trofeo de ganador. La revista del club FCB "51" estuvo allí...

Una hora antes del saque inicial, las cabezas se reúnen en la oficina de gestión del torneo. Tres de ellos se sientan en una gran mesa de conferencias, de las paredes cuelgan papeles impresos: el calendario del fin de semana, el plan de partidos, una lista de los traslados en autobús y un resumen de cuándo se hará la colada de cada equipo. Una ventana frontal ofrece la mejor vista del césped. "¿Campo segado?", pregunta Sebastian Dremmler, el jefe de organización. A su lado, sobre la mesa, hay un teléfono móvil y una radio. Se aclaran los últimos detalles. ¿Cuándo se regará el césped? ¿Cómo se comunicarán los resultados a la dirección del torneo? Después, todo está listo para el estreno de la Elite Cup sub-15.

Del 18 al 20 de agosto, el FC Bayern invitó por primera vez en su Campus a un torneo internacional sub-15. Llegaron los equipos del Manchester United, el Tottenham Hotspur, la Juventus de Turín, el Inter de Milán, el Olympique de Lyon, el AS Mónaco y el Benfica de Lisboa. Por supuesto, el Bayern también participará con sus sub-15. En dos grupos de cuatro, los equipos disputarán primero la ronda preliminar, después los cuartos de final y las semifinales, y por último los partidos de clasificación final. Siempre habrá dos partidos simultáneos, uno en el estadio y otro justo al lado, en la pista tres del Campus. Dremmler discute el calendario con los representantes de todos los equipos 45 minutos antes de que comience el torneo. Dos partidos de 25 minutos, descansos de cinco minutos, tres sustituciones por equipo, los jugadores que han sido sustituidos pueden volver a entrar. Los representantes de los equipos asienten. Entonces Dremmler dice: "¡Buena suerte!".

Mientras los equipos calientan para los dos primeros partidos, Dremmler se toma un respiro en la banda. Durante un año, un equipo de seis personas planificó y organizó en el Campus. "Tuvimos que unir mil piezas del rompecabezas para formar un todo", dice Dremmler. Vuelos de ida y vuelta para siete equipos de cinco países, unos 90 traslados en autobús en Múnich, habitaciones de hotel y comidas para 175 jugadores, entrenadores y personal de apoyo, patrocinadores, árbitros, un folleto sobre el estadio, el trofeo del ganador... "Las listas de Excel eran eternamente largas". Las expectativas son altas para un torneo organizado por el FC Bayern. "He pasado algunas noches en vela", dice Dremmler. "Cuando por fin se confirmaron todas las fechas de los viajes el pasado fin de semana, me di cuenta: ¡todo el mundo viene de verdad! Eso me quitó un peso de encima".

Los equipos llegan puntualmente a las 10.30 horas. En el estadio, el Lyon juega contra el Tottenham, mientras que el FC Bayern se enfrenta a la Juventus de Turín en el campo 3. La pequeña tribuna está bien llena, han acudido unos 300 espectadores. Los partidos inaugurales siempre son complicados. ¿Serás capaz de controlar los nervios? ¿Conseguirás hacer lo que te propones? ¿Y cómo de fuerte es realmente el rival? El Bayern y la Juve libraron un choque con muchos duelos... y un único gol: 1-0 para el Bayern.

Tras el pitido final, el entrenador del FCB Alexander Moj reúne a sus jugadores a su alrededor. "¡Enhorabuena, chicos! Ha sido un buen partido", dice, ya con la vista puesta en el partido de la tarde contra el Lyon: "Todavía tenemos que ir un poco más allá". Pero antes, el almuerzo está en el orden del día. "Nos reuniremos frente al vestuario a las doce menos cinco", dice. De camino, analiza brevemente el partido: "El Juventus fue un buen rival. Sobre todo físicamente, el duelo fue exigente. Su equipo tuvo que defenderse, incluso después de una dura entrada. Están menos acostumbrados a este tipo de físico en la liga. Un torneo internacional también significa dureza internacional, y los chicos tienen que aprender a lidiar con eso".

Los sub-15 del Bayern juegan normalmente en la Liga Regional de Baviera. En los dos últimos años ganaron allí el campeonato y también el título de campeón de Alemania del Sur. Cada verano hay una reorganización. Esta vez se han incorporado diez jugadores, muchos de ellos procedentes de clubes más pequeños de la región. "Es la primera vez que estos chicos acuden a un centro de formación de categorías inferiores, y luego juegas enseguida contra la Juventus", dice Moj, cuyo equipo está aún en plena preparación de pretemporada. "El torneo es un punto culminante, así que alguno que otro están tensos".

Después de comer, los muchachos del FCB se relajan en la zona de atletismo del campus. Los fisioterapeutas cuidan de las piernas cansadas, un grupo de jugadores se ha acomodado en un rincón. Xaver Pucci sale de la piscina de agua con el pelo mojado y una toalla sobre los hombros. "Escuela de atletismo", explica, porque tiene un pequeño problema en el flexor de la cadera, pero nada grave. Xaver tiene 14 años y lleva en el FC Bayern desde el sub-9. "El torneo está muy bien", dice, "tenemos muchos rivales de primera, así que lo esperas con ganas". Juega de lateral izquierdo, con vocación ofensiva, como su modelo Alphonso Davies. "Ya tengo ganas de demostrar lo que puedo hacer aquí", dice. "Hay muchos espectadores. Así que quieres cumplir".

Tribuna: Punto de encuentro

Entre los espectadores también hay algunos representantes de jugadores. "Normalmente, en torneos como éste, el 60% de los espectadores son padres, el 30% son representantes y el 10% son directivos del club", dice uno de ellos a la mañana siguiente. Pide permanecer en el anonimato. El hombre tiene unos 50 años, viste pantalón corto, polo, gafas de sol y lleva una taza de café en la mano. Sobre el césped del estadio, el Bayern juega su último partido de la fase de grupos contra el Tottenham. El día anterior perdió su segundo partido, un desafortunado 2-1 contra el Lyon. De los 22 jugadores sobre el terreno de juego, seguro que todos tienen ya representante, dice. "Los sub-15 son el último momento en el que puedes acercarte a los jugadores". Aprovecha el torneo para mantenerse en contacto con padres, entrenadores y preparadores físicos. Es parte del trabajo, dice. Igual que organizar servicios de transporte, apoyo escolar, formación adicional, asesoramiento nutricional... El abanico de tareas es diverso. "Firmar contratos es sólo una parte muy pequeña de nuestro trabajo". Es difícil saber si un jugador llegará al fútbol profesional antes del sub-17, afirma. "Un factor decisivo es la cuestión de la paciencia. No frenamos a nadie, pero también dejamos claro a nuestros jugadores que sólo ocurre una vez cada diez años que alguien como Jamal Musiala llegue enseguida al Bayern".

El primer contacto de Musiala con el FC Bayern fue Alexander Moj. Sus caminos se cruzaron en torneos juveniles en Inglaterra y surgió un contacto familiar informal. Moj proporcionaba a los hermanos de Jamal artículos de aficionados del FCB. ¿Influyó eso en el posterior fichaje de Musiala por el FC Bayern? "Quizá ayudó un poco", dice Moj riendo. El técnico de 34 años cumple su octava temporada como entrenador de las categorías inferiores del Bayern. Desde el sub-13 hasta el sub-17, ha entrenado a casi todas las categorías de edad. Esta es su segunda temporada consecutiva con los sub-15. "A esta edad, pasan muchas cosas físicamente y en la personalidad de los jugadores", dice. "Todos tienen metas y son muy ambiciosos". A partir de los sub-16, la zona de rendimiento empieza en el Campus. Allí es donde todos quieren ir".

Sólo rivales de renombre

"Las cosas se ponen serias en los sub-15", afirma Jochen Sauer, director de cantera del FCB. A partir de los 14 años, el FC Bayern criba talentos por toda Alemania, ya que ahora pueden pasar a la academia del Campus. Ahora también se trata de los primeros contratos. A partir de los sub-16 es posible firmar contratos de desarrollo con los jugadores, explica Sauer. Así que los talentos están a punto de dar el siguiente gran paso. La Elite Cup es una prueba al más alto nivel. Han invitado deliberadamente sólo a equipos internacionales de renombre. "No queremos saber cuál es nuestra posición en comparación con el Dortmund o el Stuttgart. Eso lo podemos valorar muy bien. Queremos saber dónde estamos en comparación con los mejores equipos de Europa". Y como todavía no ha habido un gran torneo internacional en la categoría sub-15, acaban de organizar uno ellos mismos. "No queremos que sea algo puntual, queremos establecer el torneo en el calendario de la temporada", subraya Sauer..

En la cancha, mientras tanto, el Bayern va cogiendo velocidad. Una victoria por 4-1 contra el Tottenham les aseguró el liderato de grupo, e incluso ganaron el partido de cuartos de final contra el Mónaco por 5-1, con un gol también de Xaver. "Un golazo. Pero un gol es un gol", dice y sonríe. En la semifinal del domingo, el Bayern se enfrentará de nuevo a la Juventus de Turín, que tan poco le gustó en el partido inaugural. Pero esta vez los anfitriones ganan claramente, 3-0. ¡A la final! "Estoy orgulloso de mi equipo, de cada uno de ellos", dice Moj. "En cada duelo se notaba la voluntad de conseguirlo juntos". Xaver Pucci también está contento. Entra un tiempo en cada partido, poco a poco le van pesando las piernas. "150 minutos de juego en tres días es mucho", dice, "pero para la final sacas fuerzas que ni siquiera sabes que te quedan".

El saque inicial es a las 13.30 horas. 600 espectadores en las gradas del estadio. FC Bayern contra Tottenham Hotspur - el último partido es curioso, ya que el Tottenham terminó la ronda preliminar último de grupo, sin ningún punto. Pero el fútbol juvenil a veces es cambiante. Al fin y al cabo, los londinenses llegaron a la final tras superar al Inter de Milán (1-0) y el Olympique de Lyon (4-2 tras penaltis). Allí, sin embargo, los bávaros son demasiado fuertes, ganan 2-0 y lo celebran con el trofeo de vencedores, saltando y salpicando agua. "Merecímos ganar el torneo", dice un cansado Xaver. Su plan para el resto del día: "Poner las piernas en alto y descansar". Porque a la mañana siguiente, se va al campo de entrenamiento, "con buenas sensaciones", como dice Moj. Está especialmente satisfecho con el rendimiento de sus chicos. "Estamos encontrando nuestro camino juntos como equipo". La Elite Cup no pudo ir mejor. "Súper rivales, con nosotros en Múnich, distancias cortas. Eso tiene futuro".

Lo mismo piensa Sebastian Dremmler, que está "totalmente satisfecho" con el estreno del torneo: "Hemos visto buen fútbol y sólo hemos recibido comentarios positivos de nuestros invitados. Eso nos hace querer sacar aún más provecho del torneo". Mientras tanto, los equipos invitados suben a sus autobuses. Quién se llevó el trofeo a casa es secundario. Ante todo, en la Elite Cup sub-15 se trataba de jugar al fútbol. 300 minutos en tres días para cada equipo. Al final, todos son ganadores.