Leroy Sané afronta la Eurocopa de 2024 con una motivación extra, según afirma el internacional alemán. Reveló lo que tienen en común Thomas Tuchel y Pep Guardiola y por qué nunca hay que dejar de aprender en una entrevista sobre fútbol, elogios y críticas.
Entrevista con Leroy Sané
Leroy, el director deportivo Christoph Freund dice que estamos viviendo al mejor Sané de todos los tiempos, ¿tiene razón?
"Estoy satisfecho con mi rendimiento actual, sí. Pero no me gusta ponerme superlativos de ese tipo (sonríe). De todos modos, haré todo lo posible por mantenerlo hasta el final de la temporada".
En el FC Bayern nunca se puede descansar: ¿los elogios significan siempre algo así como: 'muchacho, no aflojes'?
"La presión en un club como el FC Bayern es demasiado alta como para dormirse en los laureles. Además, la temporada aún es larga; de momento las cosas pintan bastante bien, pero también quiero estar preparado para cuando empiece la fase decisiva de la Champions League y también de la Bundesliga, a más tardar en primavera".
A lo largo de tu vida has sido juzgado por las grandes expectativas y los niveles de exigencia más elevados, ¿cómo te enfrentas a ello?
"Tienes que ignorarlo. De todas formas, siempre tengo mi propia exigencia. A veces marco un gol y doy una asistencia, pero sigo estando insatisfecho conmigo mismo. Tengo mi propio nivel de exigencia, siempre quiero estar a la altura, igual que a la altura de lo que me exige mi entrenador".
La crítica forma parte del trabajo: a algunos les bloquea, a otros les motiva. ¿El FC Bayern tiene que ver siempre las críticas como una motivación?
"En las fases críticas, siempre quieres que salga todo bien y quieres ganar. Es importante no ponerse nervioso, porque si no ocurre lo contrario: te sometes a demasiada presión y no salen las cosas bien. Esto a veces se malinterpreta ante la opinión pública: de repente se dice que los chicos no lo están dando todo, que no están concentrados, etcétera. Pero es más probable que hagas un mal pase si estás demasiado tenso y quieres hacerlo bien en todo momento. En el fondo, las críticas son sobre todo un aliciente para mí".
Hay fotos tuyas de esta temporada en las que pareces flotar sobre el terreno de juego. ¿Muestran claramente cómo te sientes desde hace meses? ¿A qué se debe?
"Tuve una muy buena pretemporada a las órdenes de Thomas Tuchel. Todo iba muy bien. Y luego una cosa llevó a la otra. Mi autoestima creció y creció, y con esta autoestima, las cosas simplemente fueron a mejor en general. El decepcionante Mundial de 2022 y la eliminación en cuartos de final de la Champions League también me dieron una motivación extra para que esta temporada fuese más exitosa, porque en resumidas cuentas, la 2022/23 no fue nada bien".
A lo largo de los años, la imagen que se ha dado de ti es que no te tomas las cosas muy en serio, pero ¿es eso cierto? Un jugador apático, indolente... ¿No son calificativos que ya no te corresponden, o que nunca te han correspondido?
"Echando la vista atrás, admito que a veces solía ofrecer demasiados blancos fáciles, sobre los que luego se hacían decenas de interpretaciones. Pero también se aprende de ello. Creces y desarrollas un mejor sentido de lo que llega al mundo exterior".
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¿Qué diferencias hay entre el Leroy que llegó de Manchester hace poco más de cuatro años y el que pisa hoy el terreno de juego?
"Ha crecido en todos los aspectos. Entonces tenía 24 años y en enero cumpliré 28. Creo que todo el mundo evoluciona en el proceso de maduración a esta edad. He tenido altibajos en mi carrera, pero también he aprendido mucho de los momentos malos. Además, ahora soy padre de dos hijos, y eso también te hace ser más maduro".
Viviste años de formación con Pep Guardiola en Manchester, ¿en qué se parece a Thomas Tuchel? Los dos movieron saleros juntos en su día...
"Thomas Tuchel es sin duda uno de los mejores entrenadores del mundo, al igual que Pep Guardiola. Los éxitos de ambos entrenadores hablan por sí solos. Sigo agradecido a Pep por todo y actualmente estoy encantado de volver a trabajar con un entrenador de primer nivel tan apasionado como Thomas Tuchel".
Un día dijiste que Pep Guardiola te volvió a programar. ¿Qué botones pulsa Tuchel? ¿Y aún te queda memoria?
"Todavía me queda algo de espaccio libre en la memoria (risas). Se puede aprender mucho de todos los entrenadores. También aprendí mucho de Hansi Flick y Julian Nagelsmann".
El año que viene, la Eurocopa se celebrará en tu país. ¿Qué sensaciones tienes para el torneo? ¿Qué pueden esperar los aficionados del torneo y de la selección alemana?
"Por supuesto, todos tenemos la sensación de que la euforia entre nuestros aficionados aún no ha llegado, por razones comprensibles. Queremos hacer todo lo posible para que el torneo sea tan exitoso como la Copa Mundial de 2006 en casa, cuando la situación deportiva inicial tampoco era la mejor. Estoy seguro de que habrá euforia para el primer partido. Será tarea de nuestro equipo empezar bien el torneo para que los aficionados nos lleven en volandas durante todo el torneo. En principio, se trata de empezar bien la fase de grupos, sin pensar en las semifinales ni en la final. Sólo hay que ir partido a partido y tomar impulso: ése es el camino a seguir".
Sobre el terreno de juego, encontraste un socio en Harry Kane, como si lo hubieras estado buscando. ¿Hubo algún momento en el que os disteis cuenta de que os entendíais a con los ojos cerrados?
"Con Harry me di cuenta muy pronto de que podía encajar muy bien. Incluso antes de jugar nuestro primer partido juntos. He seguido de cerca su carrera en los últimos años y he jugado contra él en la Premier League. Ha sido uno de los mejores nueves del mundo durante muchos años y tiene un conocimiento increíble del juego. Sabe perfectamente lo que me motiva, y viceversa. También me gusta mucho como persona fuera del terreno de juego".
¿Cuáles son tus objetivos para 2024?
"Ganar tantos títulos como sea posible y contribuir a ello. La Eurocopa en casa, en verano, será otro gran acontecimiento, me hace mucha ilusión".
Así empezará el FC Bayern el año 2024:
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