Cuando los futbolistas del FC Bayern salen del vestuario después de un partido en el Allianz Arena, tienen que pasar por delante de un muro rojo con grandes letras. Allí están escritas las siguientes palabras: Respeto. Valor. Motivación. Voluntad. Pasión.
Tras la victoria por 2-0 contra el 1. FC Köln el sábado, estos valores son más importantes que nunca para el próximo reto. El miércoles, los muniqueses se enfrentarán al Arsenal FC en el partido de vuelta de los cuartos de final de la Champions League. El partido de ida terminó 2-2 y ahora, como dijo el speaker del estadio Stephan Lehmann es "todo o nada".
Tuchel: "Necesitamos una actuación completa"
"Tenemos y queremos ganar", subrayó Joshua Kimmich con determinación. Su atención y la de sus compañeros se centraron inmediatamente después de la victoria en casa contra el Köln en lo más destacado de la semifinal. Serge Gnabry será baja segura por lesión, mientras que Kingsley Coman tuvo que ser sustituido el sábado también por lesión, "un gran contratiempo", como lo calificó Thomas Tuchel. Sea quien sea el que salte al terreno de juego contra el Arsenal, el técnico subraya: "Necesitamos una actuación completa, esa pizca de suerte, estar en forma ese día y contar con el público".
Tácticamente, también será un reto. El Arsenal demostró en la ida lo fuerte y seguro de sí mismo que puede ser el equipo. El FCB tendrá que estar muy concentrado en todos los aspectos: En defensa, en la posesión y en la presión alta. Tuchel lo tiene claro: "Necesitamos una actuación completa". El defensa Matthijs de Ligt añadió: "Será un partido difícil, tenemos que hacer frente a todos los duelos".
"El miércoles tenemos que defender como un bloque y mostrar la energía adecuada. El ambiente y el apoyo de nuestros aficionados serán sin duda excepcionales, y eso nos ayudará. Estoy deseando que llegue", declaró el defensa Eric Dier. Contra el Köln también pudimos presentirlo. La euforia era absolutamente perceptible en el Allianz Arena.
El partido contra el Köln sirvió como "calentamiento", como preparación adecuada y proporcionó una sensación general positiva. El 70% de posesión, 16 disparos a puerta, dos remates al palo y, en última instancia, los preciosos goles de Raphaël Guerreiro (65') y Thomas Müller (90+3) atestiguan también el dominio.
Y el hecho de que, tras diez partidos seguidos en la Bundesliga, hayan vuelto a dejar la portería a cero es sin duda un buen augurio. El Köln llevó peligro a la portería contraria en algunas ocasiones, pero el Bayern controló perfectamente a su rival. El guardameta Sven Ulreich -suplente de Manuel Neuer, que no arriesgó tras su lesión en el aductor- tuvo un día brillante.
Se siente la euforia
Hacia el final de la segunda mitad, los aficionados empezaron a entonar cánticos sobre los "campeones de Europa", y tras el pitido final quedó claro el objetivo a partir de ese momento. Los jugadores del Bayern saltaron brazo en alto delante de la "Südkurve", celebraron el triunfo y cantaron en voz alta y en grupo sobre la "Copa de Europa".
"Cuando nos pusimos delante de la grada, se notaba. Los chicos y chicas de la Südkurve esperan el partido del miércoles con tantas ganas como nosotros. Todos sabemos que hay algo muy importante en juego. Espero que disfrutemos de una gran noche de fútbol. Lo mejor del resultado del partido de ida es que quien gane, pasa de ronda", añadió Müller.
Una cosa está clara: somos un equipo. Nuestra motivación es enorme. El sueño sigue vivo.
Contra el Arsenal el miércoles: Respeto. Coraje. Motivación. Voluntad. Pasión.
Las estadísticas de la victoria ante el Köln:
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