
Hace 50 años, el FC Bayern se convirtió en el primer equipo alemán en ganar el tercer campeonato de liga consecutivo y la Copa de Europa en sólo ocho días. La revista para socios "51" repasa cuatro partidos inolvidables y momentos memorables fuera del terreno de juego en mayo de 1974. En la cuarta parte se analizan los augurios de la final de la Copa de Europa contra el Atlético de Madrid.
Martes, 14 de mayo
Hay poco espacio en las portadas para la final. Los periódicos se ocupan de la dimisión del Canciller Willy Brandt y de la crisis de gobierno en Bonn. Johan Cruyff analiza el partido en la "Bayerischer Rundfunk" con buen ojo y precisión táctica, alabando las «dobles extremos únicos» del Atlético y la mayor variabilidad del FC Bayern: «Los muniqueses pueden jugar a la italiana y a un ritmo inglés, controlan el juego con pases largos y cortos (...) y pueden exponer al Atlético a una montaña rusa constante, a veces fría, a veces caliente». No obstante, el veredicto del Rey Johan es: «Las probabilidades son 50:50».
„Grité como un loco.”
Gerd Müller
A la hora de comer, el presidente, el manager y el entrenador celebran una reunión secreta para planificar lo que ocurrirá después de la final y repasar diversos escenarios. En caso de victoria, el equipo volaría directamente de vuelta a Múnich el jueves y viajaría desde allí a Gladbach para disputar la final de la Bundesliga, de modo que los numerosos jugadores mundialistas dispongan del mayor tiempo posible con sus familias. En caso de derrota o repetición, viajarán directamente a la región del Rin en autocar. Pero, ¿es realmente concebible una derrota?
Gerd Müller recibe cuatro inyecciones antiinflamatorias del médico del club del Bayern, el Dr. Erich Spannbauer, y dice: «Grité como un loco». Sin embargo, su participación no peligra. El ambiente en el hotel es bueno. El estadio Heysel es «un muy buen presagio», dice Uli Hoeneß.
Al fin y al cabo, aquí es donde él y otros cinco jugadores del Bayern se proclamaron campeones de Europa en 1972. «Y aquí es también donde ganaremos la Copa de Europa». Otro buen presagio: El FC Bayern había ganado las siete finales de la historia del club.
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