
Gustl Starek consiguió el primer doblete de la historia del club con el FC Bayern en la temporada 1968/69, al ganar el campeonato y la Copa DFB. El antiguo centrocampista cumple 80 años el 16 de febrero. La revista para socios 51 habló con él con motivo de su aniversario.
Entrevista con Gustl Starek
Sr. Starek, ¿cómo se siente al cumplir próximamente 80 años?
«Mi mujer y yo nos “escapamos” al Caribe y nos vamos a un bonito crucero. Los dos celebramos nuestro cumpleaños, ella 75 y yo 80. Estoy bastante relajado con la edad. Están los gruñones que se enfadan por todo y por todos, y los optimistas. Yo tiendo a ser de estos últimos».
Usted pasó dos años en el FC Bayern y fue titular en el doblete de 1969, ¿recuerda con cariño su etapa en Múnich?
«Tengo crónicas en casa, las miro de vez en cuando y recuerdo los dos años del Bayern. Éramos un buen equipo y nos lo pasábamos muy bien dentro y fuera del campo. Aprendí a jugar al Schafkopf en Múnich, siempre formaba parte de nuestros viajes, Sepp (Sepp Maier, nota de la redacción) a veces no podía parar. Esos dos años no fueron sólo la coronación de mi carrera por los títulos, también hice buenos amigos durante ese tiempo».
¿Cómo ve al FC Bayern en la actualidad?
«Sigo disfrutando viendo al club, sigo todos los partidos. A veces me gustaría intervenir yo mismo o dar algunas instrucciones a los chicos (risas). En general, el desarrollo del club es increíble. Hoy en día, el FC Bayern es mucho más que un club de fútbol, es una institución, pero ha conservado los valores familiares que lo caracterizaban en mis tiempos. No existe casi ningún otro club en el mundo que tenga un atractivo tan fuerte como el FC Bayern. Estoy orgulloso de haber jugado en este gran club en una época en la que crecía poco a poco».
¿Cómo es su vida a día de hoy?
«Nunca me aburro. Sigo haciendo mucho deporte, juego al tenis, voy al gimnasio y estoy en el campo de golf casi todos los días, a veces con Bulle Roth, que me visita muy a menudo en Austria. Ahora soporto la derrota mejor que antes (risas). Hoy podría decirse que soy el jugador más simpático que puedas imaginar».
La entrevista apareció en la revista para socios 51.
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