Fue el momento más emotivo de la velada festiva. Cuando Bastian Schweinsteiger subió al escenario tras el discurso de su compañero Philipp Lahm, luchó por contener las lágrimas. Se nota lo que significa para la leyenda del Bayern este galardón. Schweinsteiger acaba de ser incluido, junto con otras cinco iconos del deporte, en el Salón de la Fama del fútbol alemán. El lunes por la noche, los invitados presentes en la ceremonia celebrada en el Museo Alemán del Fútbol en Dortmund no solo homenajearon a Schweinsteiger, sino también a Jupp Heynckes, Otto Rehhagel, Horst Hrubesch, Guido Buchwald y Bert Trautmann.
«Fuiste un pilar fundamental. Fuiste un jugador en el que Alemania se reconoció y al que siempre recordará», elogió Lahm, que ya es miembro del Salón de la Fama, a su colega Schweinsteiger. «Éramos una comunidad unida por el destino, eso nos unió. En 2012 se nos consideraba los incompletos. Río fue la coronación de tu carrera y de la mía». Para Schweinsteiger, el galardón fue «algo muy especial. Cuando vienes, como yo, de un pequeño pueblo llamado Oberaudorf y ahora estás aquí y te incluyen en el Salón de la Fama. Eso significa mucho para mí».
Hoeneß: «Heynckes, un pilar fundamental de este club»
El presidente honorario del FCB, Uli Hoeneß, rindió homenaje a su viejo amigo Jupp Heynckes, que no pudo estar presente por motivos de salud, en un mensaje de vídeo. «Jupp Heynckes ha sido durante años un pilar fundamental de este club. Siempre supe que, pasara lo que pasara, podía confiar en Jupp. Hay pocos en este negocio que hayan hecho su trabajo de forma tan honesta y directa», dijo el presidente honorario del FC Bayern sobre la leyenda como jugador y entrenador Heynckes, que en 2013 se convirtió en el primer entrenador alemán en ganar el triplete con el FC Bayern.
También fue galardonado Otto Rehhagel, que, entre otros logros, se proclamó campeón de Europa con Grecia en 2004 como seleccionador y fue el primer entrenador de un equipo ascendido a ganar la Bundesliga con el 1. FC Kaiserslautern en 1998. Rehhagel entrenó al FC Bayern en la temporada 1995/96, en la que el equipo ganó la Copa de la UEFA.
Con su inclusión en el Salón de la Fama, un jurado de periodistas reconoce los extraordinarios logros y éxitos que los nominados han alcanzado como jugadores o entrenadores. 53 hombres y mujeres forman ahora parte del Salón de la Fama del fútbol alemán.
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