Hubo un día, durante una apacible noche de septiembre de 2015, en el que Robert Lewandowski necesitó los cinco dedos de su mano para poder mostrar lo que acababa de hacer. Desde el banquillo, el delantero estaba viendo cómo su equipo perdía al descanso por 0-1 ante el Wolfsburgo en la sexta jornada de la Bundesliga 2015/2016. El entrenador, Pep Guardiola, reaccionó y ordenó la entrada de Robert Lewandowski en la segunda mitad, que le respondió con una actuación descomunal.
El delantero empató el encuentro en el minuto 51. Un cuarto de hora después, él solo le había dado la vuelta al partido con cuatro goles (52', 55', 57' y 60') y el marcador lucía un imponente 5-1. Con estos cinco tantos en un total de 8 minutos y 59 segundos, el polaco entró en los libros de historia:
- Fueron los tres, cuatro y cinco goles más rápidos de un jugador en la historia de la Bundesliga.
- Era la primera vez que un suplente marcaba más de tres goles en un partido de Bundesliga.
- Era la primera vez que marcaba cinco goles en un mismo partido desde que juega en Alemania. En abril de 2013, siendo jugador del Dortmund, le anotó cuatro goles al Real Madrid en las semifinales de la Liga de Campeones.
A través de este partido, Lewandoski comenzó una gran racha: el polaco le ha marcado siempre a los lobos en los últimos siete enfrentamientos, anotando 14 veces. Una racha mayor la tuvo Klaus Fischer, que, de 1969 a 1974, le marcó al VfB Stuttgart en nueve partidos consecutivos.
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